
Ya había visitado la
Cueva de Hielo o
Cova Xelu hacía un tiempo.
Esta vez pasábamos cerca y no podiamos dejar de visitarla.
Sigue siendo una de las maravillas más espectaculares y uno de los
secretos geológicos mejor guardados de
Picos de Europa.

Es teletransportarse a épocas de glaciación remotas. Por un momento te sientes
tan neolítico que parece que de cualquier esquina va a surgir un mamut a aporrearte
con su trompa (la de la nariz..). Y decir aparte de esto, que su ubicación sigue siendo
un tanto remota..afortunadamente.

Y digo esto, por que a pesar de visitarla con mis compañeros, soy el primero
en decir que es un privilegio estar allí..pero a la vez un tremendo error.
Quizás sea una posición conservacionista, pero una joya medioambiental de
tal calibre, debería caer en el más tremendo de los olvidos. Sería la forma
de preservar algo tan delicado. A pesar de ser yo uno de los "profanadores"
no creo que quince pares de crampones sea algo adecuado a este santuario.

Hablo por mi, cada uno que entone su mea culpa, pero yo me siento un poco
como cuando era piquiñín y lanzaba bolas de barro a la colada de la vecina.
Aparte de todo, decir tambien que este hielo primigenio este año era más
abundante y más macizo. Ayudaria el crudo invierno que se va yendo.

El escenario es colosal, realmente es una sima insondable de la que solo se puede
vislumbrar sin el material adecuado la punta del iceberg, y nunca mejor dicho.
Todo es hielo, y a medida que profundizamos en ella el hielo se va espesando y
sumiendose en oscuros pozos.

Estoy seguro que en
Picos de Europa tiene que haber muchas más cuevas de
este tipo, pero su acceso a buen seguro será imposible en todo momento.
Así como estoy seguro de que deben existir una serie de organismos que
encuentran aquí su hábitat idóneo y que en algunos casos ni deben estar
catalogados.