
Pero a mi entender, al final del día, ocurrió uno de esos momentos mágicos.
Uno de esos instantes de belleza extraordinaria que se te graba dentro del
inconsciente por años.

Veigas.
Estaba claro que se nos echaria la noche encima.
El sol estaba ya muy bajo. Teniamos que cambiar de valle. Del de Busbarraz al
de Saliencia. Y para colmo se nos echó la niebla encima.
Niebla de convección. Surgida del fondo de los valles y por diferencia térmica
del frio del fondo, con las superficies calentadas por el sol en cotas más altas.

Pero una luz difusa y cálida. Estábamos justo en el límite del mar de nubes.
Momentos preciosos. No se cuanto duró aquellos instantes, pero los contraluces
eran extraordinarios. Amigos como Dani, Miguel o Victor hicieron magníficas tomas.
Yo largué unas series tambien. Una muestra del resultado son estas fotos.
Doy las gracias a los "modelos" por posar.

Foto 2: Peñucos, Gecos y Monteagudos, pululando por el collado.
Foto 3: Pacoloco posando a regañadientes.
Foto 4: Montañeros en la bruma.
Su trabajo era muy sorprendido porque ha sido que no he encontrado como este hermoso intercambio.
ResponderEliminarvoyance gratuite en ligne par mail