El Jorao

Preciosa actividad la realizada una vez más por el entorno de Tresviso y el
Cañón del Urdón. De la que hoy solo veremos fotos de la primera parte.
Una vez más gente de La Peñuca,del Geco y algún cántabro que trajo Ángel.
Que una vez más capitaneo de una forma admirable una ruta de mucho nivel.
Se le acumuló el trabajo, pues en todo momento su fama como el gran conocedor
de estas peñas le precede.
Nos encontramos a vascos,madrileños...que en algun caso se unieron a nosotros.
Su libro y su mapa estan en todas las mochilas..es increible lo de este hombre.

Decir que la actividad era dura y exigente:
Urdón-Senda de el Jorao-Camino de Pria-Tresviso-Bárdina del Nacimiento-
Canal de Reñinuevo-Urdón.
9-10 horas, 20 km y 1.300 mts de desnivel acumulado.
Sin contar con las paradas cerveceras y gastronómicas como la de Tresviso.
Mi hermanín y los parameses hubieran alucinado con muchas de las cosas
tan asombrosas que ofrece esta actividad.
Solo un pero. Y es que de ir con más tranquilidad la máquina de fotos hubiera
echado humo. Las que pongo hoy se hicieron con la niebla encima, pero las
que veremos mañana se hubieran multiplicado exponencialmente.

La ruta se hizo un poco a contraleroj, por la espicha y cena que teniamos por
la noche.
La Senda de el Jorao era el antiguo camino que usaban los Tresvisanos para bajar
a Urdón antes de que se construyera la Senda de la Peña por motivos mineros.
La equivocadamente conocida como "El Balcón de Pilatos", no es dicha senda,sino
un mirador puntual a media subida.
Increible lo de esta aldea, pues sus comunicaciones con otros núcleos habitados son
simplemente de pánico. Otro ejemplo es "La Pasá del Picayo" en la senda que unia
Tresviso con San Esteban de Cuñaba.

El Jorao en si es una oquedad vertical en la mitad de la senda.
De repente te encuentras con este accidente geológico y te quedas
maravillado.
Por aquí bajaban las gentes de contínuo para realizar sus tareas o sus
asuntos diarios.
Y nosotros que ya nos parece complicado hacerlo de una forma montañera,
me imagino lo dura que era la vida durante siglos para estas gentes.
Es tremendo, pues hay que ayudarse con una cuerda debido a la verticalidad
del paso. Además de que su roca está mojada y en mal estado por años y
años de haberla pisado.

Hoy en día pasa muy poca gente por aquí. Solo montañeros como nosotros,
y algún tresvisano que cuida sus cabras en estas paredes gigantescas.
Últimamente se ha puesto de moda gracias a Ángel, su libro y el boca
a boca en foros de montaña. Y solo por gente especializada.
Por estos desventios no se puede entrar como el que va a hacer la
Ruta del Cares. Esto puede resultar peligroso en caso de despistarse
un mínimo instante.

Foto 1: Tramo de las Ballestucas. Donde Ángel Sanchez Antón guía al grupo.

Foto 2: El Jorao desde abajo.

Foto 3: Dani supera el paso. Este no tiene problemas. Es un rebeco.

Foto 4: Maria se divierte tambien. Otra que va sobrada en sitios así.

Foto 5: Gancho formando un "travieso". Arquitectura milenaria en las paredes.

Foto 6: Ángel y Luisma en Tresviso. El "profesor" no se cansa de enseñarnos.